Foto archivo
Caracas, 23 Ene. AVN.- El sistema
cambiario anunciado por el Gobierno venezolano cierra el paso a
"prácticas parasitarias" y fortalece la ofensiva del Ejecutivo contra la
guerra económica desatada en 2013 por la derecha, por tal motivo la
oposición en defensa de los sectores desestabilizadores ataca este nuevo
esquema, explicó el vicepresidente de la Comisión de Finanzas y
Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional (AN), Jesús Farías.
"Ellos (la oposición) siempre han respaldado y, de hecho, son operadores políticos de grupos económicos poderosos, y se han beneficiado de una manera grotesca de prácticas parasitarias. Con estos cambios y estas políticas, se le cierra el paso en buena medida a este tipo de comportamientos muy dañinos para la economía", expresó este jueves en entrevista telefónica con AVN.
El diputado Farías desestimó la postura de la derecha nacional, que califica al nuevo sistema como una devaluación para generar matrices de opinión negativas en torno a las medidas anunciadas.
"La devaluación significa un cambio del precio oficial de referencia de la moneda nacional. No ocurrió eso", explica, "Se estableció un sistema dual de cambio, donde una porción limitada de todos los rubros que reciben divisas, 20% solamente, fue colocada a una tasa de cambio diferencial", señaló.
Asimismo, recordó que los opositores emplean la mentira y la demagogia para tratar de crear expectativas negativas. "Ellos siempre han dicho que la moneda se va a devaluar, que la economía se encuentra en crisis y alimentan esa situación para generar expectativas, que juegan un papel fundamental en el desempeño de una economía y de una sociedad".
El nuevo sistema cambiario que se aplicará en Venezuela se basa en dos bandas de precios para el tipo de cambio: una tasa preferencial de 6,30 bolívares por dólar, que cubre 80% de los bienes y necesidades prioritarias del país y los sectores productivos; y una tasa máxima, para viajeros al exterior, compras por Internet y áreas no esenciales, que se regirá por el monto que determinen las subastas del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad).
Además, el Estado diseñó un Plan Nacional de Divisas y uno de Importaciones, que determinará el uso de las divisas por sectores y a qué se destinarán, de acuerdo con las áreas prioritarias de la Nación.
El Ejecutivo ha denunciado la existencia de empresarios inescrupulosos que han sobrefacturado importaciones para adquirir divisas preferenciales o desviado su uso, así como mafias que se aprovechan de los cupos en moneda extranjera de los viajeros.
Quienes cometen estas irregularidades estimulan el ilegal mercado paralelo de divisas, que ha llegado a precios muy elevados, sin ninguna justificación económica, por medio de la especulación cambiaria que forma parte de la guerra económica desatada por la derecha.
El analista económico afirmó que los opositores "son los voceros políticos y parlamentarios de la guerra económica", por lo que son incapaces de respaldar las acciones tomadas por el Estado para hacerle frente a estos actos ilícitos.
"No pueden avalar esta decisión, porque allí estamos golpeando a unos sectores que estimulan la especulación cambiaria. Tienen un dólar allá arriba, en niveles estratosféricos, que poco tienen que ver con la realidad, pero golpea y torpedea el desempeño de la economía", apuntó.
Contra el mercado ilegal
El parlamentario del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) está convencido de que este nuevo esquema contribuirá a bajar el monto del dólar paralelo, que ha servido como referencia de precios y estimulado la inflación en el país.
Consideró que este año la inflación se reducirá y desestimó las amenazas de escasez de productos, pues al haber acceso correcto a las divisas con el fortalecimiento del Sicad, que pasa de ofrecer 100 millones de dólares semanales a 220 millones, se impulsará la producción.
"Esta nueva política cambiaria, que garantiza mayor flujo de divisas, mayor rigurosidad en la asignación, va a revaluar la moneda. En la práctica, la tasa de cambio de referencia es la del mercado negro, que le hace mucho daño al país, y con esta política, es la intención y creo que vamos en buena dirección, vamos a bajar este dólar del mercado paralelo, con lo cual la economía podrá continuar en el proceso de estabilización", explicó.
El Gobierno ha estimado su presupuesto de divisas de este año en 42.000 millones de dólares, una cifra considerada suficiente para atender las necesidades del país e incluso superior a lo asignado en años anteriores, con lo cual se echa por tierra la tesis de que en el país hay escasez de dólares. En Venezuela, mayoritariamente los recursos provienen de la renta petrolera.
Privilegiar el desarrollo económico
Farías respaldó el nuevo esquema cambiario, pues responde al plan de desarrollo del país y a la transformación de la economía, al propiciar que las divisas se traduzcan en combustible para la expansión productiva y se apunte a la neutralización de presiones inflacionarias y cambiarias.
Por eso, subrayó que el sistema de bandas es parte de una política integral, acompañada de los planes productivos y de industrialización que impulsa el Estado. Ya se ha anunciado un plan de desarrollo industrial y se preparan políticas de estímulo sobre 11 sectores identificados como motores de la economía.
Puntualizó que la decisión de llevar a tasa Sicad la asignación para viajeros y líneas aéreas responde a un criterio de racionalidad económica.
"Hay divisas limitadas, como en todas las cosas. En economía hay criterio de escasez relativa: no alcanzan las cosas en las dimensiones en las que se demandan. No hay nada que sea suficiente para satisfacer las necesidades porque las necesidades aumentan más rápidamente que las posibilidades para satisfacerlas. Nunca habrá excedente absoluto. Entonces tenemos que decidir", explicó.
De este modo, sostiene Faría que el Estado ha privilegiado el desarrollo de la economía, "que se traduce en bienestar de la sociedad, por encima de beneficios de una parte de la población que viaja al exterior".
"Ante esa disyuntiva de beneficiar a cientos de miles de viajeros para que sigan haciendo uso de dólares a 6,30 o invertir eso en insumos para la producción de alimentos, maquinarias, medicinas, no queda duda que esto es lo que hay que privilegiar".
"Ellos (la oposición) siempre han respaldado y, de hecho, son operadores políticos de grupos económicos poderosos, y se han beneficiado de una manera grotesca de prácticas parasitarias. Con estos cambios y estas políticas, se le cierra el paso en buena medida a este tipo de comportamientos muy dañinos para la economía", expresó este jueves en entrevista telefónica con AVN.
El diputado Farías desestimó la postura de la derecha nacional, que califica al nuevo sistema como una devaluación para generar matrices de opinión negativas en torno a las medidas anunciadas.
"La devaluación significa un cambio del precio oficial de referencia de la moneda nacional. No ocurrió eso", explica, "Se estableció un sistema dual de cambio, donde una porción limitada de todos los rubros que reciben divisas, 20% solamente, fue colocada a una tasa de cambio diferencial", señaló.
Asimismo, recordó que los opositores emplean la mentira y la demagogia para tratar de crear expectativas negativas. "Ellos siempre han dicho que la moneda se va a devaluar, que la economía se encuentra en crisis y alimentan esa situación para generar expectativas, que juegan un papel fundamental en el desempeño de una economía y de una sociedad".
El nuevo sistema cambiario que se aplicará en Venezuela se basa en dos bandas de precios para el tipo de cambio: una tasa preferencial de 6,30 bolívares por dólar, que cubre 80% de los bienes y necesidades prioritarias del país y los sectores productivos; y una tasa máxima, para viajeros al exterior, compras por Internet y áreas no esenciales, que se regirá por el monto que determinen las subastas del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad).
Además, el Estado diseñó un Plan Nacional de Divisas y uno de Importaciones, que determinará el uso de las divisas por sectores y a qué se destinarán, de acuerdo con las áreas prioritarias de la Nación.
El Ejecutivo ha denunciado la existencia de empresarios inescrupulosos que han sobrefacturado importaciones para adquirir divisas preferenciales o desviado su uso, así como mafias que se aprovechan de los cupos en moneda extranjera de los viajeros.
Quienes cometen estas irregularidades estimulan el ilegal mercado paralelo de divisas, que ha llegado a precios muy elevados, sin ninguna justificación económica, por medio de la especulación cambiaria que forma parte de la guerra económica desatada por la derecha.
El analista económico afirmó que los opositores "son los voceros políticos y parlamentarios de la guerra económica", por lo que son incapaces de respaldar las acciones tomadas por el Estado para hacerle frente a estos actos ilícitos.
"No pueden avalar esta decisión, porque allí estamos golpeando a unos sectores que estimulan la especulación cambiaria. Tienen un dólar allá arriba, en niveles estratosféricos, que poco tienen que ver con la realidad, pero golpea y torpedea el desempeño de la economía", apuntó.
Contra el mercado ilegal
El parlamentario del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) está convencido de que este nuevo esquema contribuirá a bajar el monto del dólar paralelo, que ha servido como referencia de precios y estimulado la inflación en el país.
Consideró que este año la inflación se reducirá y desestimó las amenazas de escasez de productos, pues al haber acceso correcto a las divisas con el fortalecimiento del Sicad, que pasa de ofrecer 100 millones de dólares semanales a 220 millones, se impulsará la producción.
"Esta nueva política cambiaria, que garantiza mayor flujo de divisas, mayor rigurosidad en la asignación, va a revaluar la moneda. En la práctica, la tasa de cambio de referencia es la del mercado negro, que le hace mucho daño al país, y con esta política, es la intención y creo que vamos en buena dirección, vamos a bajar este dólar del mercado paralelo, con lo cual la economía podrá continuar en el proceso de estabilización", explicó.
El Gobierno ha estimado su presupuesto de divisas de este año en 42.000 millones de dólares, una cifra considerada suficiente para atender las necesidades del país e incluso superior a lo asignado en años anteriores, con lo cual se echa por tierra la tesis de que en el país hay escasez de dólares. En Venezuela, mayoritariamente los recursos provienen de la renta petrolera.
Privilegiar el desarrollo económico
Farías respaldó el nuevo esquema cambiario, pues responde al plan de desarrollo del país y a la transformación de la economía, al propiciar que las divisas se traduzcan en combustible para la expansión productiva y se apunte a la neutralización de presiones inflacionarias y cambiarias.
Por eso, subrayó que el sistema de bandas es parte de una política integral, acompañada de los planes productivos y de industrialización que impulsa el Estado. Ya se ha anunciado un plan de desarrollo industrial y se preparan políticas de estímulo sobre 11 sectores identificados como motores de la economía.
Puntualizó que la decisión de llevar a tasa Sicad la asignación para viajeros y líneas aéreas responde a un criterio de racionalidad económica.
"Hay divisas limitadas, como en todas las cosas. En economía hay criterio de escasez relativa: no alcanzan las cosas en las dimensiones en las que se demandan. No hay nada que sea suficiente para satisfacer las necesidades porque las necesidades aumentan más rápidamente que las posibilidades para satisfacerlas. Nunca habrá excedente absoluto. Entonces tenemos que decidir", explicó.
De este modo, sostiene Faría que el Estado ha privilegiado el desarrollo de la economía, "que se traduce en bienestar de la sociedad, por encima de beneficios de una parte de la población que viaja al exterior".
"Ante esa disyuntiva de beneficiar a cientos de miles de viajeros para que sigan haciendo uso de dólares a 6,30 o invertir eso en insumos para la producción de alimentos, maquinarias, medicinas, no queda duda que esto es lo que hay que privilegiar".
No hay comentarios:
Publicar un comentario